El alivio está por llegar

Utilizando equipos de última generación, nuestros expertos en electrodiagnóstico médico proporcionan diagnósticos exactos y precisos del estado y el funcionamiento de su sistema nervioso periférico y sus músculos. Y lo que es más importante, podemos llegar al fondo de su trastorno.

¿Se trata de una enfermedad o lesión que causa la ralentización o detención de las señales eléctricas en sus nervios o músculos? Nuestro EMG y NCS desenterrarán la causa raíz del trastorno (y del dolor).

Electromiografía (EMG)

Una prueba EMG está diseñada y se utiliza para registrar y analizar la actividad eléctrica de sus músculos sin estimularlos. Durante la prueba, nuestros expertos médicos en electrodiagnóstico determinan el funcionamiento de los nervios que van de los músculos a la médula espinal.

Para realizar la prueba se colocan pequeños alfileres/agujas en músculos específicos. A medida que se introducen las agujas, puede experimentar un ligero dolor o molestia. No obstante, utilizamos un spray frío para que la inserción y la extracción de las agujas resulten mucho más cómodas.

Se le pedirá que se relaje y contacte con los músculos durante la prueba. El médico controlará las señales eléctricas emitidas por sus músculos en una pantalla y/o escuchará las señales. Mediante este proceso, el médico detectará patrones y cualquier anomalía eléctrica.

Los nervios normales y sanos deben ser eléctricamente silenciosos cuando están en reposo.

Una vez finalizada la prueba, se retiran las agujas. Es posible que un día después de la prueba note algún hematoma y se sienta dolorida. Sin embargo, esto desaparecerá en unos días.

Estudios de conducción nerviosa (ECN)

Los estudios de conducción nerviosa (NCS), también conocidos como velocidad de conducción nerviosa, suelen realizarse junto con la EMG para determinar si los nervios funcionan como deberían. Sin embargo, a diferencia de la prueba EMG, los NCS implican la estimulación de los nervios y la medición de la respuesta de los nervios y los músculos.

Para esta prueba, el médico que realiza la prueba aplicará electrodos sobre la piel en varios lugares a lo largo del recorrido de los nervios que se están probando. Se utilizará una corriente eléctrica para estimular los nervios. Sentirá una sensación de hormigueo, como si una goma elástica le hubiera dado un golpecito en la piel.

Los electrodos captan las señales y miden la señal para medir la velocidad de la señal. Una señal eléctrica a lo largo de un nervio sano puede viajar a una velocidad de hasta 120 mph. La velocidad de desplazamiento será menor en los nervios dañados.

El médico puede localizar los nervios dañados ajustando la colocación de los electrodos y estimulando los nervios desde distintas zonas.

¿Cuál es la precisión de las pruebas?

La exactitud de estas pruebas depende en gran medida de la calidad y precisión del equipo utilizado y de las habilidades y experiencia del profesional médico que las administra. Las pruebas EMG y NCS suelen ser lo bastante precisas para diagnosticar enfermedades y lesiones de nervios, raíces nerviosas y músculos.

Sin embargo, hay muchos casos en los que pueden pasar varias semanas o incluso meses antes de que el daño nervioso sea evidente y detectable mediante estas pruebas. Los pacientes pueden sentir dolor, pero las pruebas de electrodiagnóstico no detectan el trastorno. Ante una situación así, nuestros expertos médicos están a su disposición para ayudarle a mitigar el dolor y las molestias que pueda estar experimentando.

Cómo preparar los exámenes

No hay que hacer muchos preparativos para la prueba. El día de la prueba, basta con ducharse para eliminar la grasa de la piel. Del mismo modo, no te apliques loción ni ningún aceite en la piel después de ducharte. Los aceites y las lociones pueden interferir en la prueba, dando lugar a resultados inexactos o completamente erróneos. También se aconseja no llevar joyas durante las pruebas.

En el aspecto médico, debes revelar cualquier medicación que estés tomando, especialmente si tomas anticoagulantes o medicamentos para alguna enfermedad.

¿Por qué hacer NCS y EMG?

La EMG y la NCV son pruebas diagnósticas esenciales para diversos trastornos, como la neuropatía periférica, la distrofia muscular espinal, la enfermedad de la motoneurona, la lesión del plexo braquial, la lesión nerviosa traumática, la miastenia grave y la miopatía. Estas pruebas se realizan para confirmar y/o descartar que un paciente padezca alguna de estas enfermedades.

No espere más para encontrar respuestas y obtener la atención que se merece. Tome las riendas de su salud y concierte hoy mismo una cita para someterse a nuestros servicios de electromiografía y velocidad de conducción nerviosa.

Nuestro experimentado equipo de especialistas está preparado para evaluar su dolencia, proporcionar diagnósticos precisos y desarrollar planes de tratamiento personalizados adaptados a sus necesidades.

No deje que el malestar o la incertidumbre le retengan por más tiempo. Actúe ahora y recupere la tranquilidad y el bienestar. Concierte su cita y dé el primer paso hacia una vida más sana y feliz. Estamos listos para ayudarle a iniciar su viaje hacia una mejor calidad de vida comienza aquí.